Cuando te diste cuanta que nada te salia bien, empezaste a cambiar, porque tambien pensaste que ya que esforzandote todo y absolutamente todo te salia mal si te importaba un huevo todo nada iba a cambiar. Pensaste que todas las veces que trataste de cambiar las cosas salian cada vez peor, entonces tomaste otro camino, dejaste al destino decidir, te fijaste que nada cambiaba, pero eras muchisimo mas feliz haciando lo que se te cantaban las pelotas, sin importar nada.
Pero igual que casi todo, eso te duro poco, volviste a preocuparte por las cosas y las cosa volvieron a estar mal, odias tanto las responsabilidades que te las tomas muy a pecho para sacartelas de encima, ya sabes, no tiene sentido, pero asi sos vos y pensaste que no lo podias cambiar, hasta que te diste cuanta que tu vida es tu vida y la podes cambiar a tu gusto. Asi lo queres hacer y asi lo vas a hacer cuando tengas el valor de enfretar todas las consecuencias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario